Una de las capacidades más relevantes de un entrenador/líder es anticipar las situaciones antes de que ocurran. De hecho, uno de los errores más comunes en los entrenadores es la falta de visión y no anticipar algunas de estas situaciones.
En muchas ocasiones se invierte casi todo el tiempo en reaccionar a las situaciones que se van dando, en solucionar problemas del día a día y en resolver conflictos. Todo esto consume una gran cantidad de energía.
Evidentemente, el día a día del entrenador consiste, en gran parte, en gestionar los problemas y las situaciones que se van dando. El entrenador ha de convivir continuamente con “problemas”. Tampoco se puede anticipar todo, y seguro que surgirán problemas o situaciones complicadas. Pero si se puede anticipar aquellas situaciones que, en función del criterio y estilo del entrenador, tengan una mayor trascendencia en el grupo o en los deportistas, aquellas que sean prioritarias y tratar que influyan en la dirección deseada.
Dirigir un grupo de personas es una gran responsabilidad e incluye riesgos en la convivencia y gestión diaria. Este riesgo y responsabilidad exige al entrenador desarrollar ciertas habilidades y ejecutar distintas acciones.
El líder debe tener visión: es necesario que vea lejos, antes. Invertir tiempo en el desarrollo estratégico y en la capacidad de anticipar situaciones, conflictos, logros, períodos altos y bajos, escenarios en competición, en entrenamientos. Liderar implica predecir las próximas jugadas, estados internos y externos, charlas, mensajes, etc. Anticiparse permite definir adecuadamente acciones efectivas.
Así pues el entrenador debe mantener una doble perspectiva:
- Mantener el foco en la conducción operativa del equipo, los aspectos del día a día y en la mejora de los recursos y habilidades del equipo
- Saber tomar distancia de las tareas diarias para visualizar el conjunto, el desarrollo del equipo y las condiciones externas en las que se desenvuelve el grupo. VER ANTES VER LEJOS
Leer e interpretar lo que está ocurriendo y anticipar lo que es más probable que ocurra son acciones que el entrenador que quiera liderar de manera efectiva debe realizar de manera constante. Puede ser de ayuda que como entrenador, pongas foco en aquellas áreas relevantes o prioritarias para tratar de anticipar posibles problemas futuros. Algunas preguntas que pueden ayudar al entrenador a trabajar sobre la anticipación son:
Teniendo en cuenta la situación y la evolución del equipo y jugadores/as ¿Qué problemas me podría encontrar durante el próximo mes en el equipo?
¿Qué dificultades me podría encontrar durante el partido?¿Qué aspectos es más probable que tenga que corregir durante la competición?
¿Qué problemas me puedo encontrar en la gestión del grupo?¿con qué jugadores/as?
En todos los grupos hay temas que no suelen tratarse o que se evitan (salvo con los más cercanos). Ese silencio que no tarda en convertirse en críticas o en inicio de conflictos, ¿De qué no se habla en tu equipo?
